LA
VIDA ÍNTIMA DE CADA UNO
El objetivo de esta
conferencia es mostrarnos que todos nos desenvolvemos en tres planos
diferentes, que no hay que confundirlos ni mezclarlos entre sí.
• La vida pública de cada uno: allí se desenvuelve uno con las
demás personas en lo referente al trabajo, oficio, dinero, grupos, gimnasio
psicológico, alumnos y en general con todo lo pertinente al mundo exterior y
por lo tanto se relaciona con el Sacrificio por la Humanidad, esta actitud en la vida pública
afecta también a la vida privada, a la vida en hermandad y a la
vida íntima.
• La vida privada de cada uno: En esta parte se desenvuelve lo
pertinente a la familia, los padres, hijos, esposa. Por lo tanto esta parte se
relaciona con el Nacimiento Espiritual, con la parte sexual, y con el gimnasio
psicológico que implica la relación
familiar.
Al observar esta vida
podemos ver que también es del mundo exterior, y se desenvuelve totalmente en
el mundo exterior.
En las distintas cosas de la
vida privada de uno y la pareja no deben intervenir otras personas, ni mezclarse
los diferentes acontecimientos y problemas de esta parte con la vida pública.
Así como tampoco debemos llevar los problemas de la vida publica a nuestra vida
privada u hogar.
• La vida íntima de cada uno: A esta vida le pertenece todo lo
relacionado con el mundo interior; las iniciaciones, los grados, los diferentes
avances de cada uno, las experiencias internas, las enseñanzas secretas que
cada uno de nosotros recibe en el mundo interior, los distintos secretos que
nos son revelados etc., etc.
La vida íntima se
prostituye, cuando la llevamos a la vida pública y eso es un error muy grave
que genera mucho estancamiento.
Al contar nuestras
experiencias, pierden fuerza; en cambio si las guardamos en silencio más
adelante las comprenderemos y eso nos dará fuerza psicológica.
Muchas de las experiencias
que nos dan nuestros Padres nos permiten vivenciar y comprender directamente
las diferentes cosas, así se vuelven realidad y nos dan fuerza.
Muchas de las experiencias
que nos dan nuestros Padres en el mundo interior, son advertencias de las cosas
que van a suceder en el mundo físico, que nos permitirían desenmascarar a
muchos traidores, y llevar los grupos por el camino correcto. Pero cuando las
comentamos a los demás no logramos
darnos cuenta de las advertencias que nos hacen. Muchos alumnos cuentan
sus experiencias tratando de que los demás digan que él esta trabajando
(orgullo y vanidad).
La mayoría de los alumnos no
saben interpretar sus experiencias y casi siempre las interpretan
equivocadamente. Pero lo peor es poner a otras personas dormidas a que nos las
interpreten puesto que nos confunden y desorientan, al mismo tiempo que nos
volvemos dependientes de ellos y revelamos los distintos secretos que nos son
confiados.
Nos perjudicamos terriblemente
cuando contamos las experiencias, nos hacemos un gran mal y nos arriesgamos a
que nos saquen del Trabajo Esotérico por irresponsables.
Muchos de los compañeros que
hoy en día están con nosotros más adelante ya no lo estarán. Recordemos que la
envidia es el motor secreto de todo. Muchas experiencias que le contamos a
otros, van a hacer que nos estanquemos en el trabajo, por las críticas que
estas generan, por las malas interpretaciones de otros, etc.
Las personas a las que les
contamos nuestras experiencias terminan retirándose porque se consideran
fracasados e internamente nos ganamos un Karma por esto.
La mayoría de los alumnos se
estancan por contar sus sueños a los demás.
Otras personas que conocen y
saben que al hombre se le conoce por sus sueños, se dan cuenta y manipulan
nuestros defectos psicológicos, al contarles nuestros sueños nos desvestimos
ante ellos.
Las experiencias no se deben
contar, porque se viola un juramento que uno hace con el Padre y la Madre
interna de no divulgar las Secretas Enseñanzas que sean recibidas. Se llaman
secretas enseñanzas porque el discípulo las recibe en los Mundos Superiores por
el Padre Interno y la Madre Particular, por ellos le son reveladas. Entonces,
al divulgarlas, no le vuelven a confiar secretos y ahí vienen las tinieblas, es
decir, lo que se conoce esotéricamente como “una noche”.